Los romances
son composiciones literarias de carácter popular de las que tenemos
testimonios escritos en castellano del siglo XV, pero que ya se
transmitían oralmente cantadas desde siglos atrás. A la recopilación de
romances surgidos hasta el siglo XVI se le llama Romancero Viejo.
Según el tema que desarrollen, los romances suelen
clasificarse en cuatro grupos:
1- De tema épico castellano (el rey don
Rodrigo, los infantes de Lara, Fernán González, el Cid Campeador...)
2- De
tema épico francés (Carlomagno, Roldán, la batalla de Roncesvalles...)
3- Fronterizos y moriscos (narran luchas entre reinos moros y cristianos)
4- Novelescos y líricos (basados en temas mitológicos, históricos y de
ficción, o bien expresión de sentimientos como el amor, la muerte, el
dolor por la ausencia del amado, etc.).
En cuanto a la métrica,
se trata de composiciones poéticas formadas por un número indefinido de
versos octosílabos con rima asonante en los pares, mientras que los
versos impares quedan libres.
Algunos de los recursos literarios
más comunes son el uso de símbolos, las repeticiones, las
enumeraciones, las antítesis, el uso de fórmulas y epítetos épicos,
diálogos, finales trágicos, llamadas al oyente y el fragmentarismo ...
Algunos de los romances más conocidos son:
Algunos de los romances más conocidos son:
- "Romance de Abenamar"
- "Romance del Conde Arnaldos"
- "Romance del Conde Olinos"
- "Romance del enamorado y la muerte"
- "Romance del prisionero"
- "Romance de doña Alda"